«Hacer algo que mejore la sociedad te realiza, sientes que el esfuerzo no es en vano»
Profesores y estudiantes de la UPCT cuentan sus experiencias orientando sus trabajos al bien común con la metodología de innovación docente Aprendizaje-Servicio (ApS)
Los dos proyectos de innovación docente con los que la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT) está poniendo en práctica la metodología Aprendizaje-Servicio (APS), orientando los trabajos académicos a proyectos de utilidad social, ha sido expuesta hoy en una jornada celebrada en el Campus de Alfonso XIII de la UPCT en la que han contado sus experiencias tanto profesores como estudiantes y ha impartido una ponencia la experta Charo Batlle.
Alrededor de una decena de estudiantes de la Politécnica están realizando trabajos fin de estudio con este enfoque, según ha explicado la coordinadora de este proyecto, María Eugenia Sánchez Vidal. “Es una gran oportunidad para enriquecer el aprendizaje, formando ciudadanos socialmente responsables y comprometidos para lograr un impacto positivo en el entorno”, argumenta.
Una plataforma de gestión de un comedor escolar en un colegio público, una aplicación para fomentar el voluntariado con Maestros Mundi, un estudio de mercado de turismo para servicios de ocio inclusivo, análisis de puestos de trabajo para personas con discapacidad, un análisis de necesidades formativas de la Asociación de Diabéticos y un plan de visibilización para las enfermedades raras son algunos de los trabajos fin de estudio que se están elaborando con este enfoque.
Durante la jornada se ha expuesto también el proyecto que ha coordinado Joaquín Roca, junto a Lola Ojados y a estudiantes de primer curso del grado en Ingeniería Electrónica para elaborar los planos en código abierto que posibilitan la reproducción en impresión 3D de prótesis biónicas como las que creó la UPCT para la Fundación Rafa Puede.
“Hacer algo que mejora la sociedad, ayudando a que niños como Rafa puedan hacer vida normal con una prótesis accesible, consigue que te sientas realizado, que no los esfuerzos no son en vano. No tiene nada que ver diseñar una mano con diseñar un grifo”, ha explicado gráficamente la alumna Rachida Ragmi.
“Es una muy buena forma de aprender, porque te motiva a utilizar programas como Autocad que no sabes manejar y que resultan complicados”, ha añadido su compañero Miguel Antonio Riquelme.