«En las redes sociales nada es gratis, la información siempre permanece»
Unas fotos subidas de tono o unos comentarios desafortunados en Facebook, Twitter o, por ejemplo, Instagram pueden salir muy caro. Ya se han dado casos de personas que han perdido su empleo por utilizar las redes sociales de manera inadecuada porque aunque lo parezca “en las redes sociales nada es gratis”, según el presidente de JUDOC, Jorge Serna, que ofreció una charla en la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT) sobre los riesgos de las redes sociales.
Serna hace hincapié en que aunque parezca que usar las redes sociales es “gratis”, nada lo es, pues toda la información que se sube a cualquier perfil social queda almacenada en Internet y en las bases de datos de dichas empresas. De hecho, hace alusión a que en muchas de estas redes, cuando se quiere eliminar el perfil social se hace solo de manera aparente, pues éste se puede volver a activar en cualquier momento.
“No nos damos cuenta de las condiciones que aceptamos cuando nos hacemos una cuenta en una red social”, advierte apuntando a que cuando se sube algo inapropiado a una red social y se quiere eliminar, suele quedar un rastro que pueden seguir las empresas cuando la persona en cuestión se va a presentar a una oferta de empleo en dicha compañía. “Luego puedes denunciar a esa red para que elimine esa información y ganarás la demanda, pero es un proceso muy largo”.
El presidente de JUDOC alerta, asimismo, de riesgos que entrañan las redes sociales para los menores. “Los padres deberían educar a los niños en el uso de las redes sociales desde que nacen, igual que los educan también en otras cosas”, asegura. A su juicio, hay que evitar que los padres den a los niños el móvil o la tablet para que les dejen tranquilos. Lo ideal sería, continúa, que padres e hijos compartan contraseñas de acceso a las redes sociales para que “los padres puedan tutelar lo que hacen los niños”.
“Nos equivocamos al subir tanta información y fotos de lo que hacemos. Las marcas quieren saber para bien o para mal todo lo que hacemos”, indica recordando que han visto una evolución “muy positiva” en los internautas, ya que dice que según se cumplen años suele se habitual “dejar de publicarlo todo”.
Sobre el grado de seguridad de las redes sociales, Serna manifiesta que hoy en día la red más segura es Instagram, mientras que la “más peligrosa” Twitter. “En Twitter hay muchos perfiles falsos y cuando los denuncias, la compañía no atiende a esas reclamaciones por parte de los usuarios”, señala recomendando que cuando a una empresa se la insulte desde un perfil del célebre sistema de microblogging, se debe hacer una captura de pantalla y poner una denuncia en comisaría.