La suerte le fue esquiva al equipo Moto UPCT de la Politécnica de Cartagena en la competición internacional Moto Student que se celebró el pasado fin de semana en el circuito MotorLand de Aragón y en el que participaron 74 equipos de 17 países.

Todo iba bien y viendo la competencia, este año estábamos entre los mejores equipos, rememora Pedro López, responsable de Comunicación del equipo.

Pasamos las verificaciones estáticas sin ningún problema, pero por la tarde comenzaron una serie de problemas que se iban a suceder uno tras otro, empezando con el sistema eléctrico que, tras una larga noche, el equipo consiguió solucionar para correr al día siguiente en las pruebas dinámicas, relata.

En estas pruebas su quebradero de cabeza fue la horquilla delantera, nada que no pudiéramos solucionar, comenta. El mayor problema llegó cuando cuando gripó el motor en la segunda vuelta de los entrenamientos libres, cuando teníamos el séptimo mejor tiempo, recuerda. Otra decena de equipos tuvo problemas con la poca fiabilidad del motor.

Pensábamos que había llegado nuestro final, pero no nos dimos por vencidos y con la ayuda de nuestro piloto, Kevin Sojo, y del equipo de Barcelona, que nos cedió su motor de recambio para que cambiáramos el pistón y el cilindro, pudimos completar la clasificación en décimo puesto, detalla.

Solo quedaba la carrera y el ultimo problema que nos enfrentamos fue la rotura del soporte del plato de la rueda trasera, suministrada por la organización de Motostudent para todos los equipos. El equipo de Valencia, que, al igual que más de una decena de equipos, no pudo correr, nos cedió recambios sacados directamente te su prototipo

Tras superar todas estas adversidades, la Moto UPCT rodaba en cuarta posición en la carrera decisiva, con opción de subir al podio, hasta que el soporte del plato volvió a romperse con el consecuente abandono de la prueba.

De esta experiencia hemos aprendido mucho, hemos descubierto un espíritu de superación, a no rendirnos nunca, y sobre todo a superar cada problema que se nos ponía por delante como equipo, intentando alcanzar nuestras metas, resume Pedro López.

Por un lado tenemos mal sabor de boca por no conseguir los resultados que esperábamos, con las miras en un podio, pero por otro estamos contentos de todo lo que hemos logrado y los adversidades que hemos superado, solo nos queda mirar hacia adelante y pensar en la siguiente edición, concluye.