«En la UPCT he sido feliz, he tenido libertad para hacer lo que me gustaba»
Entrevista a Juanjo Piñar, responsable de Extensión Universitaria, con motivo de su jubilación
Quienes le conocen saben de su sentido del humor, de su fascinación por la historia y de que siempre está dispuesto ayudar a quien lo necesita. El que ha sido durante años responsable de Extensión Universitaria, Juanjo Piñar, y ha organizado centenares de actividades culturales, se jubila, aunque como él mismo reconoce, de momento no abandonará el barco por completo.
- ¿Cómo fueron tus inicios en la UPCT?
- Empecé aquí en junio de 1999 y lo hice en el Servicio de Comunicación Interna. Me ocupaba del dossier de prensa. Más adelante, en el año 2000 o 2001, cuando salió la plaza en Extensión Universitaria pasé allí, que era lo que realmente me gustaba.
- Y desde allí has conseguido organizar conferencias de Historia, política, economía... y traer a Cartagena a profesionales de distintos sectores muy mediáticos, ¿verdad?
- Sí, como en aquella época había dinero, me traía lo mejor. Por aquí han pasado periodistas como Pedro Piqueras, hemos organizado el ciclo España Existe, que se presentó en el Salón de Columnas del Congreso de los Diputados y en el que trajimos a políticos como Mariano Rajoy, Julio Anguita y Juan Carlos Rodríguez Ibarra. También hemos conseguido que vinieran todos los padres de la Constitución menos Fraga Iribarne. Hicimos un ciclo en el que vinieron embajadores de países como Japón, México, Turquía o la India… Ha venido gente de mucho nivel. Algunos me han llamado de forma cariñosa ‘el conseguidor’. Recuerdo que en una cena en la que estaba el antiguo Obispo de la Diócesis y Medina Precioso se bromeaba con el hecho de que aquí solo dábamos conferencias y alguna carrera que otra.
- ¿Cuál ha sido tu secreto para conseguir que participaran en las conferencias personalidades tan conocidas?
- Llevarme bien con todo el mundo y tener contactos. Antes de trabajar en la UPCT trabajaba en un centro de Relaciones Laborales donde de vez en cuando también organizábamos cosas con la antigua CAM, la Caja de Ahorros del Mediterráneo. A raíz de ahí hice muchos amigos y buenos contactos que me han servido a lo largo de estos años.
-Pero la crisis hizo también mella en el ámbito cultural.
-Sí, a partir de 2010 se empezó a notar. A partir de esa época ya no traíamos a tanta gente mediática, sino que optábamos por profesionales importantes en su materia y tratábamos de que fueran de los alrededores de la Región.
-La mayor parte de tu vida profesional la has pasado en la UPCT, ¿qué se lleva de todo este tiempo?
- La segunda mitad de mi vida ha sido en la UPCT. Recuerdo con cariño el impulso a la Universidad de Mayores y el haber tenido muy buenos jefes que me han dado la libertad de poder hacer cosas.
- Tras todo este tiempo profesional, ¿hay algo que le hubiera gustado haber hecho y que no ha podido?
-La única espina que tengo clavada es la de no haber terminado mi tesis doctoral. La estaba haciendo sobre Cartagena en la Guerra de la Independencia (1808-1814). La inicié a raíz de traer a un conferenciante que era profesor en la Universidad de Sevilla y era muy bueno en su ámbito. Le pedí que me dirigiera él la tesis. Le mandaba los capítulos y siempre había mucho que corregir. Un día, le envié un capítulo dedicado a La Armada y me dijo que había que rehacerlo entero, yo entre las conferencias y el trabajo no tenía tiempo así que dije: hasta aquí, y la dejé sin acabar.
-¿Es tiempo ahora que se jubila de retomarla?
-No, yo ahora ejerceré de abuelo. Me voy a dedicar a mis nietos y seguiré unido a la Universidad de Mayores. Voy a seguir dando las clases que daba, no abandonaré el barco por completo hasta que no haya un sustituto.
-¿Cómo calificaría toda su etapa en la UPCT?
- Aquí he sido feliz. Me han dado total libertad para hacer lo que me gustaba.
-¿Qué crees que has aportado a la sociedad con todos los ciclos culturales que se han organizado?
-Un bagaje cultural tremendo. La UPCT ha organizado una actividad cultural muy importante. El que venga ahora, seguro que lo hará bien. Mientras pueda, yo estoy aquí para echar una mano.