Estudiantes del Máster en Arquitectura idean propuestas para recuperar el antiguo circuito de velocidad de Fuente Álamo
Los alumnos del máster en Arquitectura de la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT) han comenzado a elaborar propuestas arquitectónicas y urbanísticas para el circuito “La Torrica” de Fuente Álamo. El proyecto, denominado Circuito RE-PROGRA-AMABLE, trata de recuperar el espacio que ocupa un antiguo circuito de velocidad ubicado al norte del municipio, cuyo uso actual es muy limitado. Los 18 alumnos del título de la Escuela de Arquitectura y Edificación trabajarán en esta investigación durante todo el curso académico. Las propuestas se entregarán entre julio y septiembre de 2022.
El acuerdo de colaboración, firmado hoy en el Ayuntamiento de Fuente Álamo por la rectora, Beatriz Miguel y la alcaldesa, Juana María Martínez, contempla la recuperación de edificios como los antiguos boxes de coches, la cafetería o un campo de tiro y, la creación de una zona verde y de recreo familiar que ayude a convertir este emplazamiento en un pulmón verde y de esparcimiento para el municipio, explica María José Muñoz Mora, coordinadora del máster y subdirectora de Coordinación Académica de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura y Edificación (ETSAE).
El antiguo circuito de velocidad de Fuente Álamo ocupa una superficie de aproximadamente 30 hectáreas. En la elaboración de los programas del complejo por parte de los alumnos se tendrá en cuenta la posibilidad de incorporar espacios tales como: zona de acampada familiar, zona de barbacoa, zona de escalada, zona para andar, correr o montar en bici.
Las tres mejores propuestas que se presenten serán premiadas y toda la documentación gráfica que se genere -planos, maquetas, entre otros-, se darán a conocer en una exposición pública que se recogerá en un catálogo.
La finalidad, según Muñoz Mora, es de acercar al estudiante del último tramo de los estudios de Arquitectura a la realidad actual del mercado trabajando en un proyecto que es una necesidad real, con un cliente y un programa existentes.
“Se trata de una iniciativa atractiva para los alumnos ya que un encargo docente se convierte en un trabajo profesional con remuneración incluida para unos alumnos que están a punto de acceder al mundo laboral”, agrega la profesora.