El Campus Científico de Verano que cursó Pilar Villaescusa de Gea hace dos años cambió su destino académico. La joven, natural de Pilar de la Horadada, estaba realizando el Bachillerato de Ciencias de la Salud y pensando en matricularse en una carrera sanitaria cuando se inscribió para realizar una semana de formación en I+D+i en la UPCT.
En línea con su orientación hasta entonces, Pilar hizo el taller de medicina forense, en el que se hacían prácticas desenterrando y analizando huesos, entre otros procedimientos científicos. “Descubrí que en medicina se ven cosas muy desagradables”, recuerda. Al mismo tiempo, durante aquella semana de convivencia en la UPCT con otros estudiantes de ESO y Bachillerato de toda España descubrió la Ingeniería.
“Cuando nos llevaron a visitar Repsol y una ingeniera química nos dio una charla, me di cuenta que me gustaba la mezcla de matemáticas, física y química de las ingenierías”, rememora la ahora alumna del grado en Ingeniería Química Industrial en la Politécnica de Cartagena. “Me interesan la aplicación de mis estudios en sectores como el petroquímico o el alimentario, pero aún no sé hacia donde me orientaré laboralmente. Quedan muchos años”, razona desde un laboratorio de química inorgánica la alumna, aún en su primer año de carrera.
El paso por la UPCT también sirvió a Pilar para conocer la baja ratio de estudiantes por aula en la Politécnica de Cartagena, universidad que acabó eligiendo para hacer la carrera. “Me gusta que las clases sean reducidas”, subraya.
Los Campus Científicos de Verano son una iniciativa del Ministerio de Educación y Formación Profesional, el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades y la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología.