Mejoran con bioestimulantes el rendimiento y los efectos saludables del tomate bajo estrés térmico

Publicada el 09.Ago.2017


Una tesis del programa de doctorado en Técnicas Avanzadas en Investigación y Desarrollo Agrario y Alimentario (TAIDA) de la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT) ha demostrado que el uso de bioestimulantes mejora el rendimiento de las tomateras bajo condiciones de alta temperatura.

La investigación de la nueva doctora Virginia Hernández Pérez ha concluido también que estas técnicas aumentan además, en determinados casos, los compuestos bioactivos del tomate con propiedades beneficiosas para la salud.

Dirigida por las investigadoras María del Pilar Flores Fernández-Villamil y María del Pilar Hellín García, del departamento de Sostenibilidad y Calidad de Productos Hortofrutícolas del IMIDA al que también pertenece la autora, la tesis propone igualmente la optimización del manejo de la nutrición nitrogenada para mejorar la calidad nutricional del fruto y compensar el efecto negativo sobre el rendimiento de la utilización de mallas de sombreo para mitigar el estrés térmico.

El estrés térmico de las tomateras es recurrente en los cultivos de la Región de Murcia, en su mayoría desarrollados bajo invernadero, y frecuentemente se presenta de forma simultánea con otros condicionantes abióticos, como la escasez de recursos hídricos y la salinidad de suelo y agua.

“El objetivo principal de esta tesis fue conocer la influencia de la alta temperatura sobre el rendimiento y la calidad de tomate, centrándose en acumulación de metabolitos relacionados con la calidad organoléptica y nutricional del fruto”, explica la autora de la tesis, en la que ensayó diferentes estrategias agronómicas para minimizar los efectos negativos del estrés térmico, como el manejo de la nutrición mineral, la utilización de mallas de sombreo y la aplicación de bioestimulantes.

“Las plantas de tomate tienen una gran capacidad para adaptarse a condiciones de estrés térmico, pudiendo incluso restaurar las concentraciones de los metabolitos de interés después de largos periodos de exposición a alta temperatura”, concluye Virginia Hernández.