El CIM acogió este lunes su primera exposición de proyectos finales en Arquitectura desde que es sede provisional de la Escuela de Arquitectura y Edificación. Nueve estudiantes presentaron su trabajos finales de estudios y expusieron sus maquetas y paneles.

En la anterior hornada de trabajos finales en Arquitectura presentados en la UPCT los ya arquitectos presentaron ambiciosas propuestas para regenerar barrios y mejorar la vida de la población. Como el TFG de Juan Jesús López en el que proyectó el primer centro de epilepsia de España o el diseño de Alba Miró de un centro médico para enfermos neuromusculares.

Trabajos académicos de mucha actualidad, como el proyecto de parque inundable en la rambla de Benipila de José Galindo o el centro de investigación de la posidonia de Virginia Ruiz. Diseños que trascienden la Arquitectura para abordar problemáticas sociales y urbanísticas, como la escuela intergeneracional que propone Marta Muñoz para revitalizar Monte Sacro, la intervención integral en Los Mateos que plantea Antonio López o la apuesta por los espacios públicos para el barrio de El Carmen que ha plasmado María Martínez. Los tutores de estos últimos estudiantes, Marcos Ros y Fernando García, resaltan desde su Laboratorio de Investigación Urbana que “las propuestas arquitectónicas de los alumnos son una aportación a la sociedad”.